Criolipólisis Plana con EMS
La criolipólisis plana con EMS (Estimulación Muscular Eléctrica) es un tratamiento innovador y eficaz que combina la tecnología avanzada de enfriamiento local con la estimulación muscular, para mejorar la figura y reducir la grasa localizada de forma segura y no invasiva.
¿En qué consiste la Criolipólisis Plana con EMS?
Este tratamiento utiliza una técnica de enfriamiento controlado que dirige temperaturas bajas hacia las células de grasa, causando su eliminación de manera natural por el sistema linfático del cuerpo. La combinación con EMS ayuda a tonificar y reafirmar los músculos de la zona tratada, favoreciendo una mejora en la apariencia de la piel y logrando un contorno corporal más definido.
Beneficios de la Criolipólisis Plana con EMS:
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Reducción de grasa localizada: El enfriamiento intenso ayuda a destruir las células de grasa, lo que permite una reducción visible y duradera de la grasa en áreas específicas.
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Tonificación muscular: La estimulación eléctrica mejora la firmeza de los músculos en la zona tratada, ayudando a mantener una piel más tersa y firme.
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Tratamiento no invasivo: No requiere cirugía ni tiempo de recuperación, por lo que es ideal para quienes buscan resultados rápidos sin los riesgos asociados a otros procedimientos invasivos.
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Efecto reafirmante: Ayuda a combatir la flacidez y la pérdida de tono muscular en áreas como el abdomen, muslos y brazos.
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Resultados duraderos: Los efectos de la criolipólisis combinados con EMS no solo son visibles a corto plazo, sino que continúan mejorando a medida que el cuerpo elimina la grasa de forma natural.
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Mejora la circulación: La estimulación muscular favorece una mejor circulación sanguínea y linfática, lo que contribuye a una mayor eliminación de toxinas.
Contraindicaciones:
Aunque la criolipólisis plana con EMS es un tratamiento seguro para la mayoría de las personas, existen algunas contraindicaciones que se deben tener en cuenta:
- Embarazo y lactancia.
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Trastornos cutáneos en la zona a tratar (irritaciones, heridas, quemaduras, etc.)
- Enfermedades crónicas o infecciones.
- Cáncer
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Problemas con la sensibilidad o enfermedades en relación al frío (crioglobulinemia, síndrome de raynaud).
- Hernias en la zona a tratar
- Enfermedades metabólicas o autoinmunes
- Trastornos circulatorios graves (trombosis, tromboflebitis)
- Enfermedades a la piel (dermatitis, eczema,etc.)
- Condiciones musculares o neurológicas que interfieran con la estimulación eléctrica
- Implantes metálicos o dispositivos electrónicos internos (como marcapasos).
- Tratamiento anticoagulante
- Trastornos circulatorios o cardiovasculares graves.
- DIU o T de cobre.
- Problemas de piel o heridas abiertas.
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